La gamificación es la aplicación de técnicas de juego en procesos ya existentes, con el objetivo de impulsar objetivos estratégicos. No significa simplemente “jugar un juego”, se trata de la integración de la mecánica del juego a una tarea para aumentar la participación y motivación de un determinado público objetivo.
Esta se puede aplicar en cualquier proceso para aumentar la productividad en un entorno de trabajo, ganar más identificación con un proyecto o aumentar el compromiso en las comunidades y equipos. Se incluyen elementos como tablas de clasificación, niveles de rendimiento, medición del desempeño y la obtención de recompensas y reconocimiento.
Motivación: Claves para el logro de objetivos.
La idea de la gamificación es proporcionar al público objetivo (consumidor, empleado, usuario, etc.) una serie de motivaciones para asumir comportamientos específicos que promocionan el logro de objetivos esperados. Estas motivaciones o estímulos pueden ser:
- Introducir un elemento competitivo para ejecutar ciertas tareas.
- La adición de un interés extra a las actividades mundanas y repetitivas.
- La transformación de la monitorización del desempeño, dejando atrás la práctica gerencial potencialmente amenazadora, por una donde los empleados se sienten involucrados, motivados y comprometidos.
- Provisión de niveles, estados, premios, títulos, distintivos y otros elementos aspiracionales que crean una sensación de logro al alcanzar un determinado umbral de rendimiento o meta.
¿Cómo puede aplicarse la Gamificación en la Logística?
Motivación del personal:
El mundo logístico, a pesar de ser en general bastante organizado y automatizado, aún depende en gran medida de muchos procesos manuales. Los trabajadores dentro de las diferentes actividades logísticas se enfrentan día a día a tareas rutinarias como la gestión de inventarios y almacenes, recogida y entrega de pedidos, etc. A largo plazo, cualquier empleado puede llegar a encontrar sus tareas monótonas y perder la motivación. Esta falta puede llevar a una disminución del rendimiento, lo que afecta a la eficiencia general del sistema.
En el 2012 un estudio enfocado en el uso de la gamificación para mejorar la motivación del personal en logística, realizado por Lunk, Müller-Dauppert & Jung detectó que la motivación en trabajadores de logística es mucho más baja en comparación de otros procesos comerciales.
Por ello, principalmente en términos de logística interna, la gamificación puede ser una alternativa para crear un mayor compromiso del personal interno, de la que dependen los flujos logísticos, el éxito de las metas estratégicas y por ende, el crecimiento de la empresa. Porque sabemos que el personal es el factor clave de una empresa, sobre todo cuando hablamos de logística.
Colaboración en la cadena de suministro. Caso Starbucks:
Starbucks es un ejemplo de éxito en la aplicación de la gamificación en el entorno supply chain. Mejoraron su margen de beneficio y eficiencia de entrega para la distribución de artículos desechables, como vasos de café, servilletas, etc. a sus tiendas. El problema se derivaba de que los proveedores no realizaban los envíos de estos artículos a tiempo ya que los puntos de venta hacían pedidos frecuentes a última hora, sin planificación. Este comportamiento aumentaba los costes de la logística, obligando al uso de transporte aéreo, debido a la urgencia.
Resolvieron la cuestión creando un centro de datos gamificado que cumplía dos propósitos:
- Los miembros de la cadena podían ver el desempeño de cada uno y si un miembro hacía envíos con retraso, obtenía puntos de mala reputación. Funcionaba de un modo competitivo no para ser “el mejor”, si no para no quedarse atrás.
- Estos datos se compartieron entre todos los integrantes de la cadena de suministro (proveedores, distribuidores y puntos de venta) en tiempo real, se autoorganizaron y comenzaron a colaborar. Este sistema, basado en la transparencia, permitió que se redujeran las urgencias, aumentando, por tanto, el número de envíos terrestres respecto a los aéreos, consiguiendo una mejora en los márgenes de la empresa. Se logró uno de los propósitos vitales de una estrategia empresarial: aumentar los beneficios al reducir costes.
Capacitación de Personal: Caso Audi:
Audi ha desarrollado un programa de capacitación virtual (experiencia Audi VR) para los empleados de sus concesionarios. Similar a la configuración de un videojuego, los empleados pueden practicar situaciones divertidas y desafiantes para mejorar su atención al cliente.
El programa de entrenamiento cuenta con un barómetro de estado de ánimo, por lo que a tiempo real el empleado puede ver las respuestas que desencadenan sus acciones y hacerlo mejor en la próxima partida. Este es un buen ejemplo de mecánica de gamificación de retroalimentación rápida. Según Audi, más de 570 concesionarios de automóviles en Alemania ya utilizan el programa de capacitación Gamification.
También ha desarrollado un programa de capacitación similar para el personal de logística, enseñando procesos de embalaje por medio de realidad virtual. En esta pueden aprender a empacar discos de freno y otras piezas grandes para envíos al exterior. Un centro de capacitación que cabe en una maleta: un ordenador, un par de gafas de realidad virtual y dos controladores.
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Audi utiliza la realidad virtual en numerosas áreas de la empresa, desde Ventas y Desarrollo Técnico hasta Producción. De igual forma, esta misma estrategia puede ser aplicada en diferentes sectores donde la atención al cliente e inclusive la relación entre stakeholders puede verse influenciada de forma positiva. El desarrollo de capacitación virtual gamificada, es una solución escalable para el entrenamiento de personal de forma efectiva y motivante.
Ante el auge de la realidad virtual, veremos próximamente más compañías apostando en la creación de alternativas de capacitación de personal y asistencia a cliente final utilizando la gamificación. Por ejemplo, en un entorno logístico, imaginemos que un gerente de almacén puede experimentar con varias soluciones de almacenamiento, testear y comprender mejor el impacto de sus decisiones, así como la asertividad para su implementación en la vida real.
Claves para implementar la gamificación en un entorno empresarial.
Existen diferentes tipos y elementos de la gamificación que pueden ser aplicados a la logística. Lo importante es diseñar una estrategia gamificada que cumpla los requisitos y los objetivos de la empresa. La imaginación es el límite, sin embargo, hay que cumplir con ciertas reglas:
- Trasparencia de información: La gamificación sin enmascaramiento de información relevante para el desarrollo de tareas.
- Feedback en tiempo real: Los participantes deben saber si están por buen camino o entender por qué están fallando.
- Definición de reglas y objetivos: Los implicados deben entender qué se espera de ellos, cómo pueden lograrlo y reconocimiento de cuándo lo logran.
- Libertad de acción: No se aumentará la motivación sin un poco de libertad para tomar decisiones y hacer las tareas a su manera.
- Desafíos y recompensas: Las recompensas deben de ser por logros reales que impliquen un desafío. Las tareas muy sencillas no deberían de ser recompensadas.
- Planeación y diseño: Una estrategia de gamificación tiene que estar bien pensada, robusta y práctica. Empoderando la confianza y la motivación para el logro de objetivos, pero en equilibrio para no caer en competencia tóxica, trampa o bullying.
La satisfacción del cliente es la prioridad de cualquier negocio impulsado por la logística. Cuando los empleados están desmotivados, pueden descuidar y perder el interés en realizar entregas de alta calidad y comprometerse a los objetivos y valores de la empresa. Esto es un factor negativo determinante para un negocio logístico, especialmente ante una competencia despiadada donde no hay margen de error.
Utilizar la gamificación para el logro de objetivos empresariales, será cada vez más una alternativa viable tanto por la facilidad para ser una solución replicable como por los beneficios motivacionales y el impacto positivo que puede tener en la empresa. ¿A quién no le gusta jugar? Ahora el juego puede ser la ventaja competitiva que puede ayudar a resolver problemas, estimular la innovación y como resultado, hacernos más competitivos en el mercado.